Ayer fue la festividad de la Almudena en Madrid. Podría haber decidido quedarme en casa y disfrutar de una tarde tranquila, pero me salió un plan mejor. Ir al Mercado de San Antón, situado en el barrio de Chueca. Así que nada, cogimos el coche y allí nos plantamos a pesar de la lluvia.
Empezó como una tarde de encuentros. Una de mis amigas coincidió con una amiga de la universidad y minutos más tarde, yo con un compañero de trabajo que, la verdad sea dicha, me hizo mucha ilusión. Además, por fin conocí a su pequeñín.
Este mercado, si no recuerdo mal, es del año 1945 aunque recientemente ha sido reformado y adaptado a los nuevos tiempos. Tiene la peculiaridad de que las últimas plantas son restaurantes y puestos de tapas, pero no los típicos con sillas y mesas (que también los hay) , si no que es una barra continua a lo largo de toda la planta y cada uno de ellos está especializado en algo diferente. A parte hay otra especie de barra que da al interior del patio donde puedes sentarte con tu bebida y tapa, independientemente de donde lo hayas comprado.
Por lo visto también tiene una terraza, pero no la hemos podido ver porque estaba cerrada. Aun así me parece un sitio muy recomendable por la calidad de la comida y el buen ambiente. Un lugar diferente para pasar un buen rato.
4 comentarios:
Ais que ganitas tengo de venirme para Madrid unos días!
He visto muchas veces el mercado en la tele, y me parece super bonito, seguro que es de visita obligada para cuando vaya.
Están genial estos días que te vas encontrando a la gente, y pq no, que matas dos pájaros de un tiro!
kss
No sé si este ha salido por la televisión, quizás sea más probable que haya sido el Mercado de San Miguel (cerca de la plaza Mayor)que es más del estilo del siglo XIX. Aun así, cuando vengas debes visitar los dos : )
Besos!
Sí, yo también creo que el que suele salir en tv es el de San Miguel. Este de chueca no lo conozco, pero por lo que cuentas, tengo que pasarme por allí en breve.
Sí tienes que pasarte, está muy bien. Me resultó muy original la idea y, bueno, es un poco carillo. Está en la calle Augusto Figueroa, una perpendicular a la calle Barquillo y un poco más arriba.
Publicar un comentario